CUATRO PUÑALADAS
Cuatro puñaladas profundas, hirientes, dolorosas recibimos el domingo en Ramallo. Llegaron hasta bien adentro y tocaron el orgullo.Nadie, ni los más optimistas de los bonaerenses creían posible ese resultado.
Aprovecharon sus ocasiones y lograron lastimar sobretodo por el margen derecho, donde se notó demasiado la ausencia de Juan Acosta (que ya había superado con creces las expectativas depositadas en él, relegando a un guerrero de mil batallas como el Pelado Echenique) y de Martín Bohive porque el local jugaba casi todo por este costado, siendo este el carril con menos marca nuestra y cada vez que subían lastimaban. Después, la expulsión y la montaña se hacía cuesta arriba. Un cambio que no resultó, Casanova nunca terminó de encontrar su posición. Y cuando se terminaba la primera parte, un rechazo corto, y la segunda puñalada que nos dejó con la guardia baja y el ánimo por el piso.
El complemento estuvo de más y por si acaso, en la primer llegada, nos equivocamos y (ahhhh, que dolor) el puñal entraba por tercera vez. Este fue quizás, el momento en donde se vio la mayor reacción del Lobo, no para salir a buscar al rival sino para no dejarse cargar por los delanteros que se creían al nivel de los más altos jugadores del mundo. Luego llegó el cuarto y el fin del partido que nos dejó sin invicto y sin segundo puesto.
Cuatro puñales profundos pero que no cortan el sueño de llegar a la siguiente fase. Quedan 4 finales, y las chances están intactas. Ahora y como siempre todos para adelante y el fin de semana, señores dejo todo me voy a ver al Lobo porque los jugadores me va a demostrar que salen a ganar, que quieren salir campeón….
El complemento estuvo de más y por si acaso, en la primer llegada, nos equivocamos y (ahhhh, que dolor) el puñal entraba por tercera vez. Este fue quizás, el momento en donde se vio la mayor reacción del Lobo, no para salir a buscar al rival sino para no dejarse cargar por los delanteros que se creían al nivel de los más altos jugadores del mundo. Luego llegó el cuarto y el fin del partido que nos dejó sin invicto y sin segundo puesto.
Cuatro puñales profundos pero que no cortan el sueño de llegar a la siguiente fase. Quedan 4 finales, y las chances están intactas. Ahora y como siempre todos para adelante y el fin de semana, señores dejo todo me voy a ver al Lobo porque los jugadores me va a demostrar que salen a ganar, que quieren salir campeón….
