Nuevamente el Lobo sale victorioso de un partido que se podría haber complicado, pero la fortuna y el oportunismo jugaron a favor del local y terminó ganando por 2 a 0 la 4ta fecha e interzonal del TAB.
Después de un primer tiempo con dudas, donde si bien se manejaba la pelota no se era lo suficiente profundo en ataque, quedando Bochietti aislado y sin conexión, y no pudiendo encontrar los volantes el pase o el desequilibrio individual que rompa con la última línea visitante. Y en el otro arco, se generaron un par de situaciones claras para la visita que entre Ceberio, Rui y la suerte se encargaron de despejar para mantener nuevamente la valla invicta (6 partidos consecutivos sumando Liga y TAB que el Lobo no recibe goles).
En el segundo tiempo saltó desde el banco de suplentes el Lucho Quinteros y en la primera que tuvo la mando al fondo de la red, ratificando lo que había mostrado en Montes de Oca donde se había decidido a cortar esa rachita sin flechazos. Eso le dio confianza al número 15 y se lo vio muy movedizo, participativo y solidario corriendo a los rivales hasta campo propio como para generarle a Torrente y a sus colaboradores más que una duda.
Luego del desnivel el conjunto rojiverde retrocedió unos metros y defendió tan férrea y sólidamente como lo venía haciendo ante todos los embates del equipo tandilense que siempre intentó jugar . Hasta que el incansable metedor y polifuncional Pedro Ferri, uno de esos tipos que hacen simple el fútbol le rompió el arco al portero de Independiente y llenó la boca de gol de todos los simpatizantes del lobo. Sin sobresaltos llegó el fin del match. Premio para el Lobo que en los momentos claves no dudó, supo aguantar y cuando tuvo la chance la aprovechó. Tres puntos que lo dejan arriba. Valla invicta en el torneo. Y un andar cada vez más sólido del equipo que da confianza e invita a la ilusión.